viernes, 29 de abril de 2011

¡Bello Abril!….


Volví una y otra vez a brincar en tus piernas para que la pequeñez de tus pestañas se afloje hasta que el sol inicie a caracolear en tus pómulos de melocotón. Seguís brincando hasta que el amor violeta se filtró en las ranuras de los ventanales y soltaste la margarita en el asfalto para llenar de ternura el balcón.
Bello abril que se encarga de abrazar el sol justo cuando el sueño de la luna se a próxima a florecer el romanticismo y como siempre, en la mesa solo había café con pan y un destello de estrellas que tejía la fascinante noche.
Te vi sentada en las margaritas de papel con los dedos anudando la bufanda, los pájaros de la noche cantan cuando el viento viene como la libertad a encrespar el aroma de tus cabellos.
Vuelves a besarme en el silencio de la noche donde tus ojos luminosos se quedaron inmersos en el pastel de arándano. El destello de tu sonrisa se encontró con la fugacidad de las galaxias y el rico frio se convirtió en un errante caminante.
Recuerdo que deje colgando dos lágrimas en el mismo balcón y la ternura que se esparcía en la noche muto al adiós de la belleza del abril….