viernes, 4 de septiembre de 2009

Un Viernes en la Noche


Saca del armario el vestido rojo de seda, lo deja sobre la cama y entra en el baño. Llena la bañera con agua perfumada de aceite de rosas y se queda un ratico dentro. Sale y vuelve a la habitación. Se pone las bragas, el sujetador, el vestido y unas sandalias plateadas. Regresa al baño. Coge una esponja y vierte unas gotas de maquillaje, la dobla para que empape y la pasa por la cara. Luego da unos toques de colorete en los pómulos. Después traza una raya gris debajo de los ojos. Saca las sombras, pasa un bastoncito por el azul y pone un poco en el centro del párpado, hace lo mismo con el marrón extendiéndolo hacia las sienes y finaliza con unos toques dorados. Perfila el contorno de la boca con el lápiz rojo, unta un pincel en el carmín y lo extiende por los labios. Entonces escucha la voz del marido. -¡Nena! ¿qué te parece si nos tomamos un par de cervezas y unos bocadillos y nos quedamos en casa? Saca el desmaquillante del bolso, coge un algodón, lo empapa, lo lleva hacia la cara, se detiene y lo echa a la sisterna. Tira de la cadena y observa el remolino de agua. Va a la habitación, coge su bolso y sale del apartamento dando un portazo...